viernes, 18 de septiembre de 2009

Historias del Demonio: El violin




Muchos dicen que la rivalidad que hubo entre el gran compositor Salieri y el genial Mozart fué un invento pergeñado por los cronistas de la época.Alguno apunta por otra parte ,que en realidad Mozart fue instigado contra Salieri por un poeta malidicente, y que llegó incluso a acusar de plagio a este último cuando ya era una estrella en decadencia.Esta legendaria rivalidad ha sido tema recurrente en operas e incluso libros, y ahora aparece aqui..en esta pequeña historia.


El salón del principe de Salzburgo brillaba como el sol.Gigantescas lámparas dejaban caer sus brazos de cristal iluminados de velas por toda la boveda.Abajo lo más granado de la aristocracia vienesa escuchaba embelesada el último concierto de Wolfgang Amadeus Mozart.El joven compositor no deleitaba a los asistentes, los hipnotizaba.Los transportaba a otro lugar. Atrapados en aquel apasionado vals de notas viajaban lejos de palacio,lejos del blanco manto que cubria Viena y más alla de las estrellas que brillaban aquella noche de invierno.El principe ,patrocinador de aquella velada, no era consciente de que una lágrima caía indolente por su mejilla mientras escuchaba arrullado la poderosa sinfonía.Sólo una persona ,de entre todas las asistentes, parecía no estar disfrutando.Antonio Salieri reprimía con la bilis de su amargura la contenida alegría que experimentaba en sus entrañas.Cuando alfin no pudo aguantar más , se deslizó discretamente fuera del salón.En un rincón oscuro se sentó.La música de Mozart sólo llegaba hasta alli como el lejano eco de un mundo maravilloso.Lloró desconsoladamente hasta que oyó los pasos de su amigo el poeta Giovanni Battista Casti.

-Mi querido Antonio - dijo este con ternura - no me gusta verte asi.

-¿Por qué me quiere tan poco Nuestro Señor?- se preguntó el músico.

El poeta alargó un delicado pañuelo de seda a su amigo.

-El es sólo una estrella fugaz,pronto desaparecerá y todos se olvidarán de él.

Con ojos enrojecidos, Salieri miró en dirección al salón.La rabia fluia incontenible por todo su cuerpo hasta tal punto que le hacia temblar.

-Yo era el más grande Giovanni.Ahora sólo soy una sombra.Mis obras se escuchaban en todas las cortes de Europa.Ahora nadie las quiere,ya solo existe Mozart.Nunca vi al Principe llorar conmovido como esta noche..

En aquel rincón oscuro, bajo la gigantesca escalera de mármol,el alma de Salieri se iba desmoronando como un castillo de arena.Giovanni, que no queria ver asi a su amigo, intentó volver a prender denuevo la llama de su ego atormentado.

-Nunca habrá otro compositor como mi querido Antonio.Y los historiadores venideros sabrán encumbrarte allí donde te corresponde,en el olimpo donde Homero te espera querido amigo, y serás recordado siempre tú y nunca Mozart que desaparecerá como una hoja de otoño enterrada por el invierno.

Salieri no pudo evitar sonreir.El poeta continuó con su paniegírico enumerando las grandes obras del compositor y como marcaron hitos hasta ahora jamás igualados.La exageración llegó a tal punto que el ánimo de Antonio volvió a ensombrecerse, dijo entonces:

-No soy idiota Giovanni, las piezas de Mozart son sublimes.Y creia que yo era un genio, lo que yo tardo meses en componer el lo hace en dias! y mucho mejor.¿Porque el hado me es tan desfavorable?.

-Las musas son caprichosas amigo mio- repuso Giovanni- pero igual que hoy han soplado en sus oidos ,mañana podrian volverlo hacer en los tuyos.

En aquel momento, la famosa cólera de Salieri prendió como una terrible llama.

-¿Te crees tu mismo esas patrañas?- gritó irritado a su amigo- Yo siempre he creido en el talento, pero más aún en el trabajo.Las ideas no son nada si no se perfeccionan.Los diamantes no valen nada si no se cortan y se pulen debidamente.Escribiré la obra más grande jamas oida, juró que no cejaré hasta encontrar la melodía perfecta y nadie, ni ahora ni después podra superarla.

Y se fué a su habitación siguiendo la luz de la luna escaleras arriba.Giovanni le siguió con la mirada.Estaba apesadumbrado.

-Tu fuego interior es tan intenso que acabará consumiendote - murmuró para si.

Escribiendo,iluminado por un candil y viendo pasar el curso de la luna sobre los tejados de la ciudad,paso la noche Salieri preso por el afan compulsivo de escribir la obra perfecta.Garabateaba notas enloquecido.Luego cogía el papel y haciéndolo un burruño lo arrojaba a un rincón y volvía a empezar.Pasaron muchas horas y la noche llego a su cenit.El músico cabeceaba adormilado y escribía como sonámbulo.Depronto escuchó un ruido detrás.Se giró pero no vio nada salvo su habitación en penumbra.Intentó sacarse las telaralas del sueño sacudiendo la cabeza y volviendo al trabajo, cuando volvió a escuchar un ruido a su espalda.Se volvió a girar y esta vez se pegó un susto de muerte.Una figura ataviada de negro, cuya cabeza casi tocaba el techo de cámara, le observaba maliciosamente.Su cara era pálida y su piel tan fina que casi dejaba ver la calavera que había debajo.

-Qui..quién eres?-tartamudeo Salieri.

Con voz ronca, el aparecido respondió:

-Tengo tantos nombres...Pero eso carece de importancia.He mirado dentro de tus entrañas Antonio, muy dentro, y tienes un deseo que no deja de atormentarte.Déjame librarte de esa pena.

-¿Que..qué pena? ¿de que hablas?

La sombra se deslizó por la habitación hasta que la llama del candil se reflejó en sus ojos vacios y sin vida.Del fondo de una manga,la aparicion sacó un violin.

-Voy a concederte ese deseo, voy a tocarte la pieza más hermosa jamas hecha y será para tí.Considerame tu Musa.- y el visitante rio agriamente.

Entonces comenzó a rasgar el violin y Salieri comprendió al instante que aquello era muy superior a cualquier cosa que Mozart hubiera hecho o que jamás hubiera soñado con hacer.De hecho sintió tal regocijo en su alma que tuvo que sujetarse a la silla para no volar extasiado.Las notas le envolvian con dulzura mientras que la oscura figura se desplazaba por la habitación tocando el violin con singular maestria.Salieri vio las puertas del cielo y contemplo la obra de Dios y su creacion: era la musica de las esferas, el engranaje perfecto que movia la maquinaria del Universo y sonaba de un modo maravillosamente imposible.Jamás un alma mortal hubiera podido concebir algo asi. Y se sintio profundamente conmovido hasta los cimientos, tembló hasta alcanzar el summun del extasis y entonces todo cesó derrepente Y La oscuridad lo envolvio todo.

Cuando despertó el sol entraba por la ventana.Un pájaro cantaba en una rama próxima y un bello sol de invierno ascendia sobre los tejados de Viena.Tardó en comprender que todo había sido un sueño.Sin embargo, la melodia seguia pululando por su cerebro como retazos deshilachados de lo que fue un gran lienzo.Armando un gran escándalo,revolvió todos sus enseres buscando papel en blanco y cuando lo encontro empezo a escribir a toda velocidad intentando recomponer lo que había escuchado durante la noche.
A mediodía buscó a su amigo Giovanni Batista por todo el palacio.Tenía la obra perfecta.La más grande jamás compuesta y era suya.Todos sucumburian a su poder y ni siquiera Mozart podría superarla.
Encontró al poeta en los jardines al lado de una fuente que se habia congelado durante la noche.Giovanni, cuando vió la cara desencajada se su amigo dijo:

-Veo que no has pasado muy buena noche querido

Antonio estaba exultante.

-!Tienes que escuchar esto Giovanni! Es la Obra Absoluta.!El summun de la creacion!
Mozart llorará como un mocoso cuando escuche esta pieza.La más bella jamás creada.

Entonces el poeta comprendió que su amigo había caido definitivamente en las garras de la locura.

-Esta bien,esta bien, vamos dentro Antonio - le cogió por el brazo delicadamente y se lo llevó al interior del Palacio.

Cuando Salieri, presa de la más incontrolable agitación,termino de tocar la pieza a su amigo en el piano de la Camara del Principe, Giovanni no se conmovio lo más mínimo.

-Esta bién.-dijo sin expresar un especial entusiasmo- aunque creo que has hecho cosas mejores.

-¿Cómo?- Salieri no podia creer lo que oia.- Tal vez he arreglado mal una parte..!no puede ser! debo haber hecho algo mal..

Entonces el músico le contó al poeta el sueño que había tenido y como había escuchado aquella música maravillosa de aquel extraño visitante.Giovanni rio alegremente

-Fue sólo un sueño Antonio, solo un sueño- y le dio unas palmadas cariñosas.

Salieri enmudeció: "tal vez solo haya sido eso, un sueño..pero fue tan maravilloso"

Cuando subió por la noche a su habitación la excitación del dia habia mudado en una aceptación sin más de la verdad.Al menos su alma estaba en paz.Pero horas más tarde, cuando se iba a dormir, y sus ojos estaban apunto de cerrarse, depronto se percató de algo : !había un violin apoyado en una silla junto a la puerta !.Era el violin de la extraña aparicion y estaba alli, tal vez esperándole para tocar la Gran Melodia..


La historia aquí relatada tiene una parte de verdad,sólo que quien la vivió no fue Antonio Salieri sino Tartiri su maestro de violin, quien si recibió aquella inexperada visita y escucho la Gran Música.Como resultado escribió la pieza el Trino del Diablo, que se supone que es lo que escuchó aquella noche..El violin del diablo que aparecio a la noche siguiente , esta expuesto en algun museo de Viena.

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